Pocos recuerdan su paso por el Bulla.
A lo largo de la historia de , han pasado incontable cantidad de jugadores y, con eso, infinitas historias de fracasos y éxitos. Algunos negocios insólitos y otros propicios que otorgaron grandes rendimientos y entradas de dinero. Esto es algo que sucede en cada club del mundo, pues es parte de la ruleta de este deporte.
En este caso, nos enfocamos en Lucas Ontivero, quien llegó al Romántico Viajero en el año 2017 -tras pasar por ¡siete equipos en cuatro años!- bajo el mando de Ángel Guillermo Hoyos. Este último le otorgó minutos entendiendo que se trataba de un jugador con proyección, pero lesiones que no acompañaron a un descuido físico lo terminaron relegando de la institución.
Hoy, 5 años más tarde, Lucas Ontivero es el nuevo refuerzo de Sportivo Trinidense, club que pertenece a la Segunda División de Paraguay. Antes de esto, tuvo un breve paso por Rentistas donde jugó tan solo 6 encuentros y no marcó ningún gol.
Dentro del paso del delantero argentino por el Bulla, se destaca la declaración de su representante, Juan Manuel Arandilla, que aseguró que la baja del nivel de Ontiveros, se debía a su distracción por las mujeres: «Luquitas se dejó llevar por un compañero referente que inicialmente lo llevó por el mal camino, le tomó el gustito, y no hizo las cosas como las tenía que haber hecho. De haber estado tanto tiempo solo y no poder estar con una chica en Turquía, se desquitó en Chile».
Ontivero suma un capítulo más a su extravagante carrera, que además de haber vestido la camiseta de Universidad de Chile, cuenta con pasos por el fútbol de Turquía, Hungría, Eslovenia, Canadá, México, Argentina, Malasia, Estados Unidos, Brasil, Uruguay y ahora, Paraguay. Un verdadero trotamundos que, pese a su calidad, nunca pudo afirmarse en ningún lado.
Ontivero, el único culpable
Como se mencionó anteriormente, Lucas Ontivero tuvo diversos actos de indisciplina por fuera del verde césped que afectaron a su estado físico y aprontaron su salida de Universidad de Chile.
Su representante, Juan Manuel Arandilla, explicó que Ontivero fue el único culpable de su salida: “La responsabilidad de que Lucas no esté hoy en la U es pura y exclusivamente del jugador. Reaccionó tarde, no se puso nunca bien físicamente”.